sábado, 11 de octubre de 2008

Nací en el momento adecuado!

Últimamente observo en la televisión una cosa, y supongo que el resto os estaréis percatando también. Puede que haya crisis, y que el planeta esté al bordo del colapso, puede que mañana nos despertemos y estemos todos en el paro (en mi caso por desgracia es una situación que ya he conocido), puede que nuestros bolsillos a lo máximo que aspiren es a tener unas cuantas monedas de cobre, y con suerte alguna de euro, pero hay gente que aún nos ve como los que movemos la economía.

Cada día me percato que las empresas destinan la publicidad de sus productos a nosotros, somos su principal target (en la lengua de Cervantes: público objetivo), durante el verano oímos el anuncio de Coca-cola, en la que hacían una clara referencia a nuestra generación, pero no es la única, Telepizza también, y la empresa chocolatera Elgorriaga, ahora también lo hace, quizás en este anuncio dicen que le aportemos a nuestros hijos lo que nos aportaba a nosotros su producto, pero vuelven a referirse a nosotros, y existen más compañías de las que somos la principal referencia.

Y la verdad, me sorprende, pues como os dije, cada día es más díficil pagar la hipoteca (los que la tienen) o simplemente hacer la cesta de la compra.

Pero bueno, reconozco que esa publicidad me recuerda una cosa que no tienen las generaciones que nos siguieron.

Nosotros teníamos la paciencia para ver como un videojuego estaba media hora cargándose, o más tiempo, y después cuando veíamos que no había cargado bien, no desesperábamos, y volviamos a empezar, los de ahora tienen Play, PSP, Nintendo DS... y normalmente más de una, y sus juegos tienen unos efectos y gráficos, que nosotros nunca soñamos.

Nosotros teníamos el don de poder jugar con una bola hecha con papel de plata y bolsas de plástico, y no el último balón Adidas utilizado en la Eurocopa que recientemente gano nuestro país.

Nosotros pasábamos las clases en la última fila jugando a carreras, con un papel y un boli, o a las guerras de las galaxias con los mismos materiales, y no nos dedicabamos a ignorar al profesor jugando en nuestro móvil de última generación.

Nosotros disfrutábamos de una tarde con una bolsa de pipas, y con la única intención de hablar y reirnos, ahora si quieres hablar, o usarás el complejo lenguaje de los sms, o los mil y un emoticonos del messenger.

Nosotros simplemente vivíamos, ellos caminan por un mundo que no conocen, y que no se esfuerzan por conocer.

Y hay que dar gracias, porque si esta crisis la tuvieran que superar ellos, simplemente estaríamos acabados.

Por esto y más motivos, estoy orgulloso de pertenecer a mi generación, en ésta crecí, viví, os conocí, y disfruté cada uno de mis minutos.

Yo nací a finales de los 70's, y estoy orgulloso.

No hay comentarios: